Hoy he visto que han cambiado los anuncios de las paradas de autobuses. Han quitado los del último estreno de Netflix y han puesto los de un colegio. También anuncios en autobuses, periódicos, radios… Imaginaros, también han utilizado el muro de la escuela pública de nuestras hijas para colocar carteles de varios colegios… y están repartiendo hojas de mano en las guarderías. Todos ellos con unos slogans muy llamativos y todos de escuelas concertadas: «El valor de la diferencia» o «Resultados contrastados» o «Seguro y agradable» … y me pregunto: ¿qué es la educación en la actualidad? ¿Una mercancía a vender? ¿No era un derecho?
El Gobierno de Navarra también ha lanzado su anuncio para la campaña de matrícula bajo el lema «Escuela pública, tu primera elección». ¿Y en la CAV, qué? Pues el mismo cartel del año pasado que dice «Ven a lo nuestro». Sólo han cambiado la fecha. Para la campaña de este año no han visto la necesidad de sacar nada nuevo, no han pensado en ningún lema. Me parece significativo, la falta de cariño, y también la falta de responsabilidad. ¿Los centros públicos de la CAV no merecen una campaña especial?
A muchos nos parece que quienes tienen la responsabilidad principal en el cuidado y gestión de lo público, quieren situar a la escuela pública en segunda línea. Hace tiempo que se desató la alarma en torno a este asunto. Pero si no disminuyen las diferencias entre las redes, parece que van en aumento, gracias a las políticas educativas. Menos mal que la comunidad educativa de la pública (profesorado, familias…) no está dispuesta a aceptarlo, y hay que ver los vídeos que, de forma voluntaria, están realizando, los carteles y el intento de mostrar lo que se hace en las diferentes escuelas. Esta es una razón importante para etar orgullosas de la Escuela Pública Vasca.
¿Y las familias en edad de matricular a sus criaturas, qué? Algunas estarán perdidos en este mercado en el que se ha convertido la educación intentando comprar el mejor producto. Otras recurrirán a lo que les toque (no pueden plantearse nada porque no tienen capacidad de elección) y otras apostarán por la escuela pública, con la convicción de que es para todos y para todas y, en la medida en que la conciliación se lo permita, trabajarán para que su escuela sea mejor desde la asociación de padres y madres o utilizando otras vías de participación. Otro punto de encuentro de la Escuela Pública es eso: la gente, la comunidad, la colaboración. Gente que apuesta por cuidar lo que es de todos, entre todos.
¿Cuál debería ser la función de la educación? ¿Elegir una escuela u otra que genere personas que destaquen sobre las demás (valor de la diferencia) o recoger todas las diferencias (sociales, económicas, de origen, culturales) y ofrecer una educación de calidad de forma inclusiva? ¿El desarrollo y el nivel cultural de las personas que se enfrentan a los retos sociales, culturales y económicos que tenemos para actuar como algo a contrastar o para vivir en sociedad?
Pues eso, puertas abiertas.
Maribel Lopez de Luzuriaga Alonso
Euskal Eskola Publikoaren Aldeko Plataforma